La rosca de reyes es una tradición en México, y aunque no es mexicana de nacimiento, cada 6 de enero nos juntamos en familia a cortar un trozo de este pan y acompañarlo con chocolate caliente.

Ya para el siglo XII se hacían en Navarra  unos roscones (panes) donde el que encontraba una haba, se le designaba el «Rey del Faba».

Esta tradición llega a Francia en el siglo XIV, donde toma un sentido católico y se transforma en la Galette des Rois (un tipo de pay a base de hojaldre y relleno de frangipane), en la galette se esconde un féve (figurita) y al igual que en la versión del roscón, el que lo encuentre se convertirá en rey (sólo que le toca pagar la próxima galette y la champaña).

Galette des rois

Para el siglo XVI llega a México este pan, de la mano de los colonizadores, y aquí se adorna con higos, frutas cristalizadas, ate, acitrón y pasta de azúcar. Con el paso de la modernidad el haba se cambia por la figura de plástico de un niño, y hoy en pleno siglo XXI hasta de Baby Yoda, figuras del nacimiento, etc.

El símbolo es totalmente religioso, donde se festeja la llegada de los Reyes Magos ante el Niño Jesús. La forma circular representa el amor infinito a Dios (aunque en México se elaboran ovaladas, porque no caben en las charolas roscas muy grandes con forma circular). Los frutos del adorno son las joyas de las coronas de los Reyes.

rosca

 

Que la figura esté escondida, simboliza cuando José y María escondieron al niño Jesús para salvarlo de Herodes, que mandó matar a todos los niños.

La tradición dicta que si encuentras el niño, te conviertes en su padrino, lo tendrás que vestir para llevarlo a la iglesia el Día de la Candelaria (2 de febrero) y tienes que invitar los tamales y el atole ese día a todos los que participen de la fiesta de la Candelaria.

Bueno, y hasta aquí la parte tradicional. Hoy en día encontramos roscas con adornos muy creativos, algunas rellenas con algo más que el niño, y como decía al principio, hasta con personajes que nada tienen que ver con lo religioso.

Un punto importante: el acitrón proviene de la biznaga, una planta en peligro de extinción; así que desde hace algunos años está prohibida su venta, para que lo tengas en cuenta!