Les cuento que vimos en Costco una pierna horneada, congelada y lista para comer (obvio, hay que descongelar y calentarla).

 

Se nos antojó, y sólo había un “pequeño problema” eran 3 kilos y 700 gramos aproximadamente…

 

Así que decidí hacer 3 cosas:

  • una parte la cocinamos a la sartén, en rebanadas y con ella hicimos lonches y también nos la comimos así, tal cual…
  • otra parte la mariné en un adobo (receta próximamente en el blog) y la hornié. Actualmente se encuentra congelada para comer después…
  • la última parte la corté en cuadritos y los cociné en salsa (receta que también les daré en próximos días) y también la porcioné y se fue derechito al congelador.

La verdad es que está muy buena la pierna, sabe como a chuleta y pues sí rinde y bastante.

Lo que yo hice fue ponerla en el refrigerador 24 horas antes de cocinarla, para que se descongelara de a poco.

Aquí en la foto se ve la pierna cocinada en una sartén, sin más y acompañada de una ensalada.