Hoy les sigo compartiendo sobre el fabuloso evento del Festival Cultural del Mole que se realizó en Hacienda La Magdalena.

La mayora nos explica que el Mole blanco y el rosa provienen de la región de Hidalgo o Tlaxcala, y ella los ha ido adaptando y puliendo para que sean deliciosos.

En ambos casos los moles son espesados con amaranto, y de preferencia son servidos en cuanto está listo el mole, para que no pierda el color, como en el caso del rosa.

El mole rosa tiene ese color por el piñón rosa y por un toquecito de betabel.

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Y dato cultural: mole proviene de la palabra «mulli» que es guisado o salsa, generalmente preparado por chile, tomates, especias y semillas. En los primeros registros que se han encontrado se llamaba chimolli, después pasó a ser clemole o tlemole y por último como hoy lo conocemos: mole.

Es por ello que existe una amplia variedad de moles en México, siendo los insignia el mole de Oaxaca y el mole Poblano.