Pues hice mi primera práctica del taller de panadería… y pues como ya lo dije antes, no es lo mismo estar con el maestro al lado… y si a eso le sumamos que no poseo una batidora Kitchen Aid como las que tenemos en la escuela, las cosas se pueden complicar (y se complicaron!)

Pero bueno, celebrando el día mundial del pan, les traigo mis pininos en la preparación de pan casero, unos bisquets con un toque de queso crema.

La receta es la normal para bisquets pero se les agrega medio queso crema (del de tamaño normal, que si la memoria no me falla es de 180 gramos).

Tuve algunos problemas al amasar la masa, puesto que como en la clase la hicimos en la batidora, no sabía bien a bien cómo hacerla a mano… así que mi intuición me dictó arenar los polvos con la mantequilla, manteca y queso crema… después a la hora de añadir la leche, con sólo 150 mililitros fue suficiente para que se ligara todo… pero me sobró 350 mililitros! Y eso no es muy normal….

¿Qué hice mal? Primero, los polvos con la grasas se deben hacer una crema… y en segundo pues como no hice lo primero pues por eso me sobró tanta leche! Y en tercer lugar le puse 1 huevo de más… supongo que así pasa con la primera vez que se hacen estas cosas en casa! Jeje!

Que conste que les dejo la receta ya acondicionada a cómo debería hacerse….

 

Bisquets con queso crema
50 porciones medianas

5 huevos
½ litro de leche
50 gr de polvo para hornear
10 gr. de levadura seca
250 gr. de manteca inca
250 gr. de mantequilla
½ queso crema
1200 gr. de harina
200 gr. de azúcar glass
1 cda. de vainilla al gusto
15 gr. de sal

Se mezclan todos los polvos: harina, levadura, polvo para hornear, azúcar y sal.

Con eso se hace una fuente grande. Enmedio ponemos la manteca, mantequilla y queso crema. Se bate todo de tal forma que quede una masa cremosa. Cuando ya no tenga grumos se añaden los huevos, vainilla y la leche de a poco. Amasar hasta tener una masa que ya no se pegue en las manos y sea suave y manejable.

Esa masa se extiende y luego se dobla en tres… volvemos a doblar en 3 (foto). Extender la masa y cortar los círculos (yo usé un vaso de plástico).

Poner en charolas con papel encerado. Marcarles el circulito ya sea con una punta de duya o con una tapa de refresco.

Barnizar con 1 huevo extra y un poco de colorante amarillo.

Meter en el horno precalentado a 200ºC, y cocinar unos 20 minutos (depende del horno).